Terapia Sistémica
Abordaje a nivel de relaciones personales, su interacción con grupos, patrones y dinámicas
En la terapia sistémica, el terapeuta, desde su primer encuentro con el paciente, centra su interés y valoración en:
- Qué sucede en las interacciones que el sujeto vive consigo mismo, con los demás y con el mundo.
- Cómo funciona el problema que se presenta en el interior de este sistema relacional.
- Cómo el sujeto ha intentado, hasta el presente combatir o resolver el problema (soluciones ensayadas).
- Cómo es posible cambiar esta situación problemática de la manera más rápida y eficaz (Nardone y Watzlawick.1992)
Con la terapia sistémica se pretende:
Evitar dependencias.
Nada se ha añadido que el paciente no tuviera.
Ha aprendido a percibir la realidad y a reaccionar frente a ella, utilizando positivamente sus propias dotes personales, gracias a experiencias guiadas por el terapeuta, pero ahora es absolutamente capaz de seguir solo.
La perspectiva sistémica, por sus características, se ha aplicado con mucha eficacia a las terapias de pareja o familia y en los conflictos en organizaciones, además de a multitud de problemas de relación intrapersonal.